El Departamento del Tesoro de Estados Unidos publicó este martes una nueva licencia general que permite a Chevron, Halliburton, Schlumberger Limited, Baker Hughes y Weatherford International continuar sus operaciones esenciales para preservar sus activos y la seguridad de su personal en Venezuela hasta el 3 de junio de 2021.
Esta decisión emitida por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) y adscrita al marco de sanciones de Estados Unidos a Venezuela, sustituye a la licencia general 8F de fecha 21 de abril de 2020 que permitía dichas actividades hasta el 30 de noviembre de este año y es la única que regula las actividades de estas empresas en Venezuela.
La licencia continúa con la prohibición a estas empresas estadounidenses de taladrar, extraer, procesar, comprar o vender y transportar petróleo venezolano, pero les permite continuar actividades de mantenimiento esenciales, así como el pago de salarios a sus empleados y contratistas.
Chevron continuará cumpliendo con las leyes y regulaciones relevantes a las actividades que está autorizada a realizar en Venezuela. Seguimos comprometidos con la integridad de nuestros activos en las empresas mixtas y con la seguridad y el bienestar de nuestros empleados y sus familias, así como la continuidad de nuestros programas sociales y humanitarios durante estos momentos difíciles¨, aseguró Ray Fohr, vocero de Chevron, luego de conocerse esta extensión.
Thomas Shannon, quien fue subsecretario de Estado para Asuntos en el Hemisferio Occidental y buen conocedor de la situación en el país suramericano, aafirm recientemente que sería un error salir de Venezuela en este punto, en muchos sentidos nos necesitan hoy más que nunca.
Chevron y las otras cuatro empresas tampoco pueden pagar dividendos a PDVSA o a cualquier otra entidad que sea propiedad directa o indirecta, de PDVSA en 50% o más.
Según un reporte de Caracas Capital Markets, Chevron mantiene posiciones minoritarias en dos grandes sociedades con PDVSA: PetroPiar (30%) y Petroboscán (39,2%).
El mismo reporte de la casa de inversión asegura que en el segundo trimestre de 2020 Chevron valoró sus inversiones en Venezuela en 2.6 billones de dólares.
Ni un taladro
Tanto Schlumberger como Halliburton y las otras empresas estadounidenses han reducido sus operaciones al mínimo.
Chevron y su subcontratista Nabors pararon de taladrar, lo que ha llevado a Venezuela a la situación inusual de no tener ni un solo taladro extrayendo petróleo por primera vez en 110 años, advierte el informe de Caracas Capital Markets.
Sin embargo, en la búsqueda por evadir las sanciones, el régimen de Nicolás Maduro se ha apoyado en socios rusos, chinos, iraníes, entre otros, para crear un esquema de traslados de petróleo buque a buque de forma que sea difícil hacer el rastreo del origen de la carga.
Rosneft fue sancionada por la OFAC por esta estrategia que ayuda a PDVSA. Por su parte, los demás socios internacionales en las empresas mixtas, como la española Repsol, la italiana Eni y Reliance de India, han seguido extrayendo el crudo de Venezuela bajo un esquema de intercambio por diesel, producto que hasta el mes de octubre estaba bajo una exención de las sanciones de Estados Unidos.
Según datos publicados por Bloomberg, entre estas tres empresas se comercializaron 9,7 millones de barriles durante de septiembre de este año, lo que significó la mitad de las exportaciones venezolanas de crudo de ese mes.
Transición política
Caracas Capital Markets destaca que esta extensión de seis meses para la operación de Chevron y las otras compañías en Venezuela se da en el medio de la posible transición a la administración de Joe Biden en la Casa Blanca.
Esto es importante por varias razones. Primero, es de hacer notar que no es la primera vez que las sanciones a Venezuela han sido extendidas de una administración a otra, ya que el equipo de Obama extendió su Orden Ejecutiva que declara a Venezuela como una amenaza inusual y extraordinaria a la seguridad nacional en la semana previa a la inauguración de Trump en enero de 2017. ( ) Además, esta extensión le da tiempo al equipo de Biden para organizar todo, que el Senado le apruebe el gabinete y que puedan desarrollar y poner en práctica sus políticas hacia Venezuela, indica el reporte de Caracas Capital Markets.
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